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Cantabria y las nuevas cuotas pesqueras

Javier Puente Redondo, diputado nacional del Partido Popular por Cantabria

 

El pasado mes de diciembre se produjo una situación que, como poco, deberíamos calificar de anómala: los representantes socialistas de Cantabria mostraron interés por las cuotas de que dispondrá el sector pesquero de nuestra Comunidad. Lo extraño es que tal hecho se haya producido después de la celebración del Consejo de Ministros de Pesca de los países miembros de la Unión Europea, en el que se asignaron los Totales Admisibles de Captura (TAC), y no antes, lo que transmite la sensación de que quieren hacer un uso partidista de un tema que nos afecta a todos y de un sector que nos debe merecer la máxima consideración.

Vaya por delante que nunca me ha gustado la crítica por la crítica. Hace apenas unas semanas manifesté públicamente mi reconocimiento hacia la labor desarrollada por el anterior Gobierno socialista en su apuesta por una mayor implantación de las nuevas tecnologías en determinados servicios públicos; y también estoy seguro de que en política pesquera se han hecho buenas cosas.

Por desgracia, éste no es el caso que nos ocupa. Me gustaría centrar la cuestión y aclarar ciertos equívocos que algunos parecen empeñados en difundir. Es público y notorio que hay un antes y un después en la manera en que se han defendido los intereses del sector pesquero español. Antes, la ministra socialista del sector llegó a ausentarse o abandonar las instancias comunitarias dejando a otros miembros de la delegación en el proceso de negociación; ahora, el ministro Miguel Arias Cañete es reconocido en las altas instancias de la Unión Europea por su capacidad para defender al extremo los intereses de los pescadores, agotando hasta el último minuto disponible el tiempo de negociación.

Antes, los representantes del Ministerio en materia de Pesca asumían los planteamientos de la Comisión en los debates anuales de asignación de los TAC, en muchos casos por la imposibilidad de aportar la información necesaria y situar los intereses de España en la mejor situación; ahora, el actual ministro ha conseguido que las propuestas iniciales de la Comisión de la UE fueran corregidas por el Consejo de Ministros con significativas mejoras en los TAC y cuotas disponibles para nuestro país.

Antes, al Gobierno del PSOE y a sus responsables, no le preocupaba que la Comisión pusiera de relieve que cuando no se tenga información científica sobre una determinada especie se aplicara el principio de precaución; ahora, le ha correspondido al Gobierno de la Nación del Partido Popular corregir estas carencias, que estaban mermando la credibilidad española en las instancias comunitarias e internacionales.

Conviene precisar que hace ya algunos años que se pusieron en marcha los mecanismos de fijación de las cuotas de pesca. Dicho procedimiento responde a la aplicación del "principio de estabilidad relativa", negociado en su momento por un gobierno socialista y que dejó en mal lugar al sector pesquero español, así como a la valoración científica realizada por el Consejo Internacional para la Exploración del Mar (ICES).

Los representantes socialistas cántabros parecen haber olvidado algunas cosas de relevancia: por ejemplo, han olvidado que la merluza del sur ha conseguido un aumento del TAC del 15 por ciento, el máximo permitido por al actual Plan de Recuperación; también han olvidado que en la merluza de Gran Sol y Golfo de Vizcaya se ha conseguido un mantenimiento del cupo frente a la reducción del 32 por ciento propuesta por la Comisión; y asimismo han olvidado que la caballa es una especie que no tiene un reparto interno directo dentro de la Unión Europea sino que está sujeta a una negociación con países costeros de la UE como Noruega, Islas Feroe e Islandia, por lo que la cuota asignada no es definitiva al reservarse una parte de la misma para la negociación.

Es difícil pensar que tantos "olvidos" sean casuales y no producto del ánimo de manipular una realidad ante la que debemos enfrentarnos. Pero creo que también sería erróneo por mi parte subrayar las carencias del pasado y no atender como se merece a lo que hoy en día se está haciendo.

En la actualidad el Gobierno de Cantabria se encuentra en pleno proceso de consulta con las asociaciones y organizaciones representativas del sector para realizar la asignación de las cuotas de las distintas especies a los armadores, en el marco del Grupo de Trabajo del Cantábrico Noroeste que aprobó la Conferencia Sectorial de Pesca. Se trata de una negociación transparente, que pretende alcanzar un acuerdo fundamentado en las capturas históricas de las pesquerías y su incidencia socioeconómica.

Creo que no sólo dicha transparencia, sino también el compromiso con el sector pesquero que tienen el Presidente Ignacio Diego y la Consejera Blanca Martínez ha quedado claramente puesta de manifiesto: a través de un organismo como el Consejo Consultivo de Pesca, nuestra Comunidad ha sido parte activa en todo el proceso preparatorio del Consejo de Ministros.

En suma, la labor desarrollada en relación con el sector pesquero español en general y con el cántabro en particular está siendo particularmente intensa. Mi punto de vista es que el esfuerzo de todos, más allá de legítimos intereses partiditas, es imprescindible para alcanzar unos resultados finales que garanticen la dignidad y viabilidad de todos quienes desarrollan su actividad dentro del mismo. Juntos podemos lograrlo.

 

Tribuna de opinión publicada el 24 de enero de 2013 en El Diario Montañés

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