Partido Popular en Cantabria

Además del asunto de la casa de los gorilas, quien entre 2003 y 2011 fuera mano derecha de López Marcano en Cantur, Diego Higuera, tuvo que hacer frente ante los tribunales de justicia a otra cuestión relacionada con una agencia de viajes de su familia de la que él mismo era socio y a la que, siendo director de Cantur, contrató la mayoría de los desplazamientos de la empresa.

Acusado de presunta prevaricación, el juzgado finalmente consideró que, aunque los hechos pudieran ser reprochables penalmente, al no ser funcionario y Cantur regirse por el derecho privado, no se le podía condenar por prevaricación.

Pese a haber salido indemne en ambos procesos, Higuera aún está pendiente de responder ante el Tribunal de Cuentas por supuestas irregularidades contables que se relacionan con el pago de compras personales por medio de la tarjeta de la empresa.

En total, el Tribunal de Cuentas ha cifrado en más de 140.000 euros los supuestos gastos irregulares en la compra, entre otras cosas, de ropa, tabaco, revistas femeninas, gasolina, cambio de ruedas, lavandería o multas.

Siguiendo la línea de defensa de casos como la casa de los gorilas o la agencia de viajes, Higuera ha intentado eludir la posible responsabilidad alegando que el Tribunal de Cuentas no tiene jurisdicción al estar Cantur sometida al derecho privado, no ejercer funciones públicas y su personal no ser funcionario público.

Sin embargo, el tribunal señala entre otras cosas que, según su normativa, puede incurrir en responsabilidad contable toda persona física o jurídica, pública o privada que tenga legalmente encomendada alguna de las funciones referidas en relación con caudales o efectos públicos.

De momento, el Tribunal de Cuentas le ha embargado su casa de Valladolid como prenda con la que responder cautelarmente de estas supuestas irregularidades contables, es decir, el pago con la tarjeta de la empresa de gastos personales y no de representación.

Por si todo esto fuera poco, el hombre de confianza de López Marcano en Cantur podría volver a sentarse en el banquillo tras que un juzgado haya concluido recientemente que, por esa misma cuestión, pudo haber cometido un presunto delito de malversación de fondos públicos.